Como la Coca Cola, a lo Elvis Pelvis, Sandro, dejó tatuado su nombre en una generación de jovencitas que ahora orbitan los 60. Ascendido, indiscutiblemente, a ícono pop y más saboreado que lollipop por las ladies, la desaparición de Sandro puso de luto a las señoras del Club y a las sin club, en épocas en que Hotmail dejaba de de ser hot y todo el mundo se cambió a Gmail (háganlo si quieren estar hot, claro. Gmail es lo mejor del POP mail y está más hot que Sandro.) De esa época de palpitaciones, en los convulsionados años 70, mi recuerdo logra capturar las "Fantasías Animadas de Ayer y Hoy" junto a mi tía, embelesada por las contorsiones pélvicas de SandrElvis. Qué viva el rey! El drama romántico de Rafael había sido desplazado por el macho argentino y sus niveles hormonales subidos de ROSA ROSA. Háganle a ese Karaoke! Por Sandro, por encender pasiones y por estar más hot, hoy, que el verdadero difunto, Hotmail.
miércoles, 3 de febrero de 2010
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